De que servía decir un montón de palabras sacadas de diccionarios, experiencia y un sin fin de fuentes desde donde antes las oiste, si no habia tiempo para dedicarse ni siquiera un exiguo "hola" , cansada de poner la cara de siempre cuando cae la noche, esa cara de mañana quizás si me salude con ganas de saber más de mi, pero me equivoco, quimeras e ilusiones perdidas, a veces me siento a pensar en que gasto mucho tiempo pensando en los demás como si realmente a alguien le importara, aunque ya hace meses no me preocupa si a alguien le importa o no, pues la preocupación por pequeñas cosas ya no es mi fuerte.
Cuando las cosas son grandes y me preocupan, las hago pequeñas para dejar de pensarlas, como el que caiga la noche y espere un saludo, ya no me importa, ni me tiene que importar. He dibujado sonrisas en gente a la que yo jamás quise dedicar un saludo, y eso hoy me llena más que todo lo que creí justo para mi. Ya no espero un mundo mejor, ni espero un heroe que cambie el gobierno, ni espero que Piñera se meta al hoyo a buscar a los mineros, tampoco espero que Lavin mejore la calidad de educación, tampoco espero que el ebrio de la otra cuadra se rehabilite, tampoco espero que la yegua de siempre deje de serlo,tampoco espero que la viuda de al frente se case con el solterón de el otro pasaje, tampoco espero que la señora del metro pida permiso, menos aun espero que tu te des cuenta de lo que pierdes, tampoco espero que el que me fue infiel se convierta en Job, tampoco espero que el bicentenario una a Chile, tampoco espero que la economía esté a favor de los pobres o menos ricos, menos aun espero que lluevan petalos de rosas, tampoco espero su saludo, todo lo que esperé, no es más que un absurdo.
Un absurdo que hoy me hace escribir, un montón de mierda.
PD: La foto, mi sobrina, que tiene mi misma cara de rabia y pena, "puchero".
